Tradicionalmente se ha venido aceptando el Coste histórico como único principio admisible, siendo siempre aplicable en la valoración de los distintos elementos patrimoniales (inmovilizado, existencias, etc) salvo que el precio de venta fuera inferior, que prevalecía éste.
Sin embargo, el Plan General de Contabilidad de 2007, contempla un nuevo criterio en la valoración de activos financieros: el coste amortizado.
Si quiere conocer mas sobre el asunto, por favor pique en el fichero adjunto:
Revista-Ucaman-número-57_Coste-amortizado